Por: Tany G Fernández G
A La Habana
I
Hay un barco de papel
que se posa en alta mar,
quién sabe a quién transporta
o si es impulsado por las piedras
y aquellas otras cosas
que arrasa la marea.
II
La línea que termina el mar
no logró desaparecer la luz
pero alguien grita “adiós”
al arrojarse hacia sus bordes.
III
Como en un mar abierto
sin destino,
sin tiempo,
sin duración,
se quedaron tus palabras
manchando la superficie.
IV
Pedazos quedaron
que acarician el océano.
Así dejaste aquellas otras cosas
que tal vez nunca regresará la marea.

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